“…Todo aquello, una vez autoluminoso en la esfera del espíritu

se había vuelto ahora sus propios contrarios:

El Ser colapsado en un vacío inútil

que sin embargo era un cero engendrador de mundos;

la inconsciencia al envolver la Mente cósmica

produjo un universo desde su sueño letal;

el Goza caído en un coma negro, insensible,

retrayéndose de sí mismo y de la eterna alegría de Dios…”