Libro 10. Canto 4. Seccion 3ii
“Quienquiera que seas detrás de tu humana máscara,
incluso si eres la Madre de los mundos
y fijas tus demandas bajo los reinos de la Fortuna,
la Ley cósmica es superior a tu voluntad.
Incluso el mismo Dios obedece a las Leyes que hizo:
la Ley permanece y jamás puede cambiar,
la Persona es una burbuja en el mar del Tiempo…”…”