“…Mas también vio esto, a su alma que lloraba por dentro,

sus vanas búsquedas que se aferraban a la huidiza verdad,

sus esperanzas, cuya sombría mirada emula la desesperación,

la pasión que enseñoreaba sus miembros vehementes,

la agitación y el rapto de sus pechos anhelantes,

su mente que trabaja afanosamente insatisfecha con sus frutos,

su corazón que no conquista a su único Amado…”