“Reina, no forcejees para cambiar la secreta voluntad,

Puede llegar un día en el que deba permanecer desvalida

en una peligrosa orilla del destino del mundo y del suyo,

portando el destino del mundo en su pecho solitario,

portando la humana esperanza en un corazón abandonado

para conquistar o fracasar en un último límite desesperado,

a solas con la muerte y al borde del filo de la extinción.

Su simple grandeza en esa última terrible escena

debe cruzar solitaria un peligroso puente del Tiempo

y alcanzar un ápice del destino del mundo

en donde todo es ganado o todo es perdido para el hombre…”