Libro 7. Canto 4. Seccion 1
“…El alarido de la carne torturada y de los torturados corazones
que retorna al corazón y a la carne sin ser escuchado por el Cielo
ha desgarrado mi alma con su aflicción e ira desvalidas.
Yo he visto al campesino abrasado en su cabaña,
he visto el acuchillado cuerpo del niño sacrificado,
he escuchado el llanto de la mujer violada desnuda y arrastrada
entre los aullidos de la horda de los sabuesos del infierno,
yo lo he contemplado, carezco de poder para salvar..”